"Para llegar a Lezama Lima" de Julio Cortázar (comentario)

Photo by Kobu Agency on Unsplash

“Para llegar a Lezama Lima” es un ensayo del escritor argentino Julio Cortázar, presente en su libro La vuelta al día en ochenta mundos (1967). En el ensayo se encuentra una reivindicación de la obra Paradiso del escritor cubano Lezama Lima. En mi opinión, el texto es una confesión de las impresiones, por no decir influencias, que caen sobre Cortázar al leer a Lima, reconociendo la obra de Lima como parte de la alta categoría de literatura hispanoamericana. Esta tarea de reivindicación resulta necesaria debido a que parecen estar presentes en la crítica literaria una serie de prejuicios en contra de Lima. Cortázar lo coloca al nivel de Octavio Paz y Jorge Luis Borges, y esto no es gratuito.

Lima ha sido víctima de las circunstancias históricas de su tiempo: la Cuba de Castro. El hermetismo que se le adjudica a la obra de Lima, Cortázar lo redime reconociendo ese hermetismo con honra por la expresión mítica de Lima y su sublime estilo barroco. La defensa no termina. Ciertamente, el aislamiento de su país y su aislamiento cultural, le proporcionaron beneficios a su prosa, la cual, según Cortázar, no necesita una tradición directa porque las asume todas. Lima no necesita justificarse para escribir. Es entonces cuando la reclusión significa libertad. Y no es el único caso, en diferentes escalas, claro esta, podemos mencionar aquí a Emily Dickinson. En todo caso, leer a Lezama Lima no es una tarea fácil, se nos asegura. Pero este ensayo se encarga de presentarnos a Lima y nos ofrece una clave de acceso hacia su literatura, sobre todo al lector común.

Cortázar, me parece, toma como pretexto la defensa de Lima, para sacar a relucir un problema más serio: la falta de un lector diagonal. Un lector que pueda responder a la lectura de Lima. Ya que un nuevo tipo de literatura conlleva un nuevo tipo de lector. El lector común se resiste, este enterado o no, a leer obras ajenas a cualquier categoría literaria, obras alejadas de un terreno firme. Estoy de acuerdo con estas afirmaciones ya que son problemas de carácter personal, pero que además afectan a una sociedad, su historia literaria y la economía cultural. Es la siguiente cita la que logró llegar a mí de manera directa: “Pobre de aquel que quiera viajar por Paradiso como viajaría por el libro del mes, por esa apremiante televisión en la pantalla de papel de las novelas usuales.” Así, Cortázar redefine a la lectura, distinguiendo entre la lectura como continuación lineal de imágenes mentales y, en su lugar, ahora exige del lector una lectura como juego en el que se concentran el intelecto y las emociones, donde se reorganiza la realidad y se cuestiona.

No hay comentarios:

Publicar un comentario